Saber cómo aplicar base de maquillaje y corrector está entre los principales desafíos a los que se enfrentan las mujeres de todo el mundo. Porque algo que quizá sobre el papel parezca fácil no es, ni mucho menos, sencillo.
Requiere una serie de conocimientos, seguir unos pasos concretos y ser muy cuidadosos para que la base y el corrector se apliquen de una manera adecuada. A continuación, te explicamos cómo hacerlo y también repasamos otros aspectos fundamentales que están relacionados.
¿Base de maquillaje primero o el corrector?
Los profesionales de la belleza se dividen entre qué debería ir primero, si el maquillaje o el corrector. Y lo cierto es que ambos puntos de vista tienen su lógica y aspectos positivos. Hay quienes incluso, con mucho cuidado, usan un corrector antes y otro corrector distinto después.
Nosotros te vamos a dar nuestra opinión, en la cual ponemos el corrector primero. Hay casos en los que no lo recomendaríamos tal y como te iremos explicando a continuación.
Está claro que ser autodidacta es una de las mejores cualidades que podría tener cualquier maquilladora.
Sin embargo, si quieres acelerar al máximo tu aprendizaje, te recomendamos ver esta lista con los mejores cursos para aprender maquillaje. Los hemos seleccionado y analizado minuciosamente para ayudarte a elegir el ideal.
¿Cómo aplicar la base de maquillaje?
Procede con los pasos que te vamos a detallar y conseguirás dominar el uso de la base de maquillaje y corrector a la perfección.
1. Lávate las manos
No vas a querer que ninguna bacteria haga de las suyas en tu cara. Por ello, tienes que comenzar lavándote las manos con jabón. Es recomendable que el agua esté templada, para que luego no pongas dificultades a la circulación y al uso de los productos de maquillaje.
2. Ponte un humectante para la piel
Tener la piel húmeda te ayudará a que el resultado del maquillaje sea más positivo. Con un buen humectante harás el trabajo de preparación de una forma perfecta.
Es recomendable que el humectante que compres disponga de protección solar incorporada en la fórmula.
Si tienes la piel grasa, pon una prebase encima del humectante. El beneficio que obtendrás de ello será una superficie mucho más homogénea que ayudará a obtener un mejor resultado.
3. Ponte el corrector de color
Decíamos antes que recomendábamos poner el corrector antes que la base bajo una serie de circunstancias. Esas circunstancias son que tengas algún tipo de imperfección que tengas que cubrir.
Por ejemplo, las ojeras están a la orden del día y son algo que se ve beneficiado de aplicar primero el corrector. También hay otros casos habituales, como áreas de la cara que tengan una pigmentación específica.
El corrector por el que te tienes que decantar será el opuesto al del color de tu rostro teniendo en cuenta las posiciones del círculo cromático.
Inicialmente, el corrector no hará que las ojeras desaparezcan, pero preparará el terreno para que luego la base se ocupe de ello.
Si el corrector te resulta un poco complicado de usar, tómatelo con calma. Vas a ponértelo muchas veces y cada vez lo harás mejor. No obstante, también puedes echarle un ojo a los cursos de maquillaje online que te proponemos aquí para aprender cómo hacerlo, con un par de consejo.
Volviendo a las ojeras (porque se trata de uno de los principales problemas a los que nos enfrentamos), tendrás que aplicar el corrector empezando en la zona exterior y yendo hacia la parte de la nariz. La manera de aplicar el corrector será con pequeños toquecitos, siempre con cuidado de proteger los ojos.
Lleva el corrector a base de toquecitos desde la parte en la que hay más ojeras hasta la parte de arriba. Intenta que la capa de corrector que pongas tampoco sea excesivamente gruesa.
4. Ponte la base de maquillaje
La base de maquillaje la tienes que aplicar por toda la cara. Para ello, vas a necesitar hacer uso de una de las distintas herramientas posibles:
- Esponja de maquillaje
- Una brocha para bases (pero solo en el caso de que vayas a usar una base de tipo líquido)
- Tus propios dedos
Una de las cosas de las que tienes que cuidarte es de no afectar en exceso a la zona donde has puesto el corrector en los pasos anteriores. Asimismo, ten en cuenta que la base se tiene que concentrar principalmente en las zonas donde el color de tu cara más lo necesite. No pongas base y base simplemente por poner.
Para aplicar la base es recomendable que lo hagas desde el centro hacia afuera.
Comienza con una pincelada de base al lado izquierdo y otra al lado derecho de tu nariz.
Después de eso aplícala en la frente y la barbilla, siempre en el centro de estas.
A partir de ahí ya tienes suficiente base como para comenzar a difuminar y a extenderla por toda la cara. Si al acabar de extender la base de maquillaje te encuentras con que hay alguna zona que todavía muestra manchas o algún tipo de enrojecimiento, te recomendamos poner base exactamente ahí.
No la pongas en cantidades industriales, simplemente lo justo para difuminar esas marcas. Mientras estés extendiendo la base, ten muy clara la recomendación de ser muy sensible. Hacer toquecitos para poner la base también es imprescindible.
Eso evitará que aparezcan rayas en la piel y ayudará a que la base quede mejor en la cara. Si usas los dedos aportarás una ventaja adicional, dado que la temperatura de las yemas hará que la base se funda mejor con la piel.
5. Haz unos arreglos en el resultado final
Es posible que la base haya quedado un poco espesa en algunas partes de la cara. Lo que te recomendamos hacer en este caso es aplicar un polvo fijador traslúcido. Un truco enseñado en todo curso de maquillaje online que se precie.
Eso ayudará a que el resultado final sea superior. Si tu cara ha quedado demasiado llamativa, usa polvo de color mate.
Para reducir el apelmazado de la base también puedes usar un aplicador de polvo que no tenga producto y aplicarlo con pequeños toques. En este punto también es necesario que te fijes en partes de la cara que a veces quedan olvidadas, como las orejas.
Al fin y al cabo, también forman parte del rostro. Si eres una persona que suele tenerlas rojas, te irá muy bien hacer un ajuste con corrector y base.
6. Ponte el maquillaje que quieras
Tras el corrector, la base y el polvo traslúcido, nadie va a impedir que te pongas el maquillaje que te apetezca.
Si bien puedes optar por ir lo más natural posible sin maquillaje adicional, si te lo pones tampoco será un problema.
Para terminar, te damos dos consejos importantes. El primero: no hace falta que pongas base en el cuello. Y el segundo: no olvides que, a lo largo del año, el tono de tu piel puede sufrir cambios dependiendo de la temperatura. Por ello, es posible que necesites distintos tonos de base en base a si es verano o invierno.
Entrenadora personal, nutricionista, profesora de yoga, coach y amante de una vida saludable. Dedicada a ayudar a las personas a que consigan sus objetivos de una forma saludable y consciente, aportando cada día contenido de calidad en redes sociales.